La ensaladilla rusa es uno de los platos típicos del verano y hoy os doy mi versión con un toque diferente: la mahonesa de aguacate.
Ya os hablé de esta «mahonesa» en la ensalada de judías (ideal para el verano también) y no es que la tradicional sea mala, siempre y cuando ésta sea elaborada con aceite de oliva virgen extra. El problema existe con las mahonesas industriales, que suelen estar elaboradas con aceites refinados que no son de buena calidad.
Por ello, lo ideal es elaborar nuestra propia mahonesa, pero si os apetece darle un sabor distinto a la ensaladilla de siempre, os animo a que probéis este invento (os adelanto que todo aquel que la prueba cae rendido 😛 ). Además, su forma de elaboración es mucho más sencilla que la de la mahonesa tradicional.
Eso sí, os recomiendo que la cantidad de mahonesa de aguacate que vayáis a preparar sea la justa para la cantidad de ensaladilla que vayáis a consumir en el momento, ya que al día siguiente el sabor cambia totalmente. Por tanto, si os sobra ensaladilla, haced más mahonesa en el momento en el que la vayáis a tomar.
Patatas y almidón resistente
Cómo sabréis, las patatas tienen una cantidad considerable de almidón. Cuando la patata se cocina, el almidón se hace más digerible. Sin embargo, si la patata se deja enfriar, este almidón sufre una serie de modificaciones en sus estructura que hacen lo que se conoce como almidón resistente. El almidón resistente, tal y como su nombre indica, es aquel que se resiste a la digestión por el intestino y es eliminado en las heces.
Este almidón resistente, a su paso por el intestino, el cual sirve de alimento a las bacterias que habitan en el mismo, tiene múltiples beneficios para la salud:
– Tiene efecto prebiótico, ya que sirve de alimento a nuestro bacterias, por lo que contribuye a tener un microbiota saludable.
– Es protector de enfermedades intestintales, cáncer de colon…
– Aporta mayor efecto saciante.
– Disminuye los niveles de glucosa pospandrial y mejora la sensibilidad a la insulina.
– Este almidón resistente hace que la patata (o cualquier otro alimento que sufra este proceso, como la pasta o el arroz) aporten menos calorías. ¡Con la mala fama que ha tenido siempre la patata!
La ensaladilla rusa es una buena forma de obtener este almidón resistente. ¿Os animáis a probar mi versión con mahonesa de aguacate?

ENSALADILLA CON MAHONESA DE AGUACATE
(4 raciones)
Ingredientes para la ensaladilla:
1 kilo de patatas
3 zanahorias
2 huevos
2 latas de atún al natural
2 puñados de aceitunas verdes
Ingredientes para la mahonesa de aguacate:
1 aguacate
4 cucharadas de vinagre
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 diente de ajo
1 cucharadita de mostaza
Sal al gusto
Cuece las patatas y las zanahorias (previamente peladas) hasta que estén tiernas. Pasado este tiempo, escurre el agua y deja enfriar. Pela las patatas, córtalas en cuadraditos a tu gusto y haz lo mismo que la zanahoria. Dispón ambos ingredientes en un bol.
Cuece 2 huevos durante 10 minutos.
Mientras, prepara la mahonesa de aguacate disponiendo en el vaso de la batidora el aguacate junto con el resto de ingredientes. Bate hasta obtener una salsa homogénea y espesa. Ve probándola según vas haciéndola por si tienes que hacer alguna rectificación.
Añade al bol de patata y zanahoria el huevo picado, el atún y las zanahorias picadas o cortadas en rodajas. Mezcla todo bien y añade la mahonesa de aguacate.

¿Os animáis a probarla? Si es así no dudéis en decírmelo y compartirlo conmigo. Si queréis estar al día de más recetas, consejos y novedades no olvidéis seguirme en Facebook e Instagram 🙂
Gracias por leerme.